Contar con una máquina tostadora de café no siempre es sencillo o económico, sobre todo para quienes viven en el campo. Muchos caficultores no cuentan con los recursos para adquirir una propia o sus fincas no tienen la energía eléctrica suficiente para hacerlas funcionar.
Los agricultores suelen asociarse en cooperativas y contar con el apoyo de instituciones públicas o privadas si es que tienen que tostar grandes cantidades de grano verde para su comercialización ¿Pero qué pasa si solo quieren una pequeña cantidad para consumir su propio café en casa?.
Ahora muchos caficultores están retornando a sus raíces y recuperando los saberes de sus abuelos para tostar y degustar el café que producen en sus propias tierras.
En el marco del Primer Concurso de Cafés Especiales del Alto Huallaga, un grupo de 15 productores y productoras de esta zona de Huánuco, pusieron a prueba toda su habilidad y destreza en el antiguo arte de tostar café en olla de barro utilizando una fogata como fuente de calor.
José Manuel Zuñiga Martínez, especialista de poscosecha de Devida, nos explicó que con estas actividades se busca promover el consumo de café a nivel local entre los mismos productores sin necesidad de que acudan a una cafetería.
Los jueces, integrados por catadores expertos de Devida y Technoserve, evaluaron que el tueste de los participantes sea uniforme y que los granos hayan llegado a un nivel óptimo de desarrollo.
Tostar de manera artesanal exige mucha paciencia y concentración. Durante cerca de 15 minutos, los productores y productoras controlaron el fuego de sus fogatas y movieron constantemente sus cucharas para evitar que el grano se pegue a las ollas.
Con la técnica adecuada se pueden lograr muy buenos perfiles de tostado, y con ese ligero sabor ahumado de la olla de barro que ya es considerado el toque especial de este procedimiento.
En esta oportunidad el ganador fue Samuel Fuentes Santa Cruz, productor del caserío de Macoras, distrito de Marías, provincia de Dos de Mayo. Samuel se mostró muy feliz y agradecido con Dios, y nos dijo que el secreto de un buen tostado artesanal es hacerlo con fuego lento, mantener la concentración y la calma.