Rony Lavan Guerrero es gerente general de LimCof Perú, una cooperativa que agrupa a 600 caficultores de Jaén y San Ignacio que producen cafés en zonas altas, entre los 1500 a 2000 metros sobre el nivel del mar. “La altitud es un parámetro que indica el potencial para la calidad de café en taza”, refiere.
Un 45% de su producción se vende como café de especialidad, que va de los 83 puntos en taza hasta los 90 puntos. El resto, de 82 puntos, se vende como café orgánico. La meta más próxima es que el 60% de la producción sean cafés especiales. Para el 2021, Rony espera que esta oferta alcance entre al 80% a 90% de la producción total.
Sus mercados están en Estados Unidos, Corea y Europa, pero también quieren atender el mercado interno, por lo que preparan cafés especiales con la marca Picorana (Gourmet y Presidencial, con 87 y 88 puntos, respectivamente) para la venta directa y planean abrir una cafetería en Lima. La empresa tiene actualmente una cafetería en Jaén. A futuro quieren ser una empresa con otras líneas de negocio como una tienda de fertilizantes para crear abonos orgánicos y una micro financiera.
El rumbo de LimCof Perú está definido y pensar que la empresa tiene solo tres años de creada y su gerente, tiene 30 años. Rony tiene 11 años en la industria del café, es catador Q grader y tostador. Es, además, hijo de caficultores y trabajó desde los 16 años en Cenfrocafe.
“Empezamos con 300 productores asociados que autofinanciaron el proyecto, ya que cada socio dio tres quintales, lo que dio un total de 600 quintales valorizados en S/300 mil. También obtuvimos un importante financiamiento”, comenta Rony. Ello permitió la instalación de una planta de procesamiento y laboratorio de cata y tostado. Además se han adquirido certificaciones como la de Comercio Justo, Café Orgánico y sellos sostenibles como UTZ, explica.
La cooperativa acopia el café de sus socios haciendo énfasis en la calidad de su café, por lo que se les provee de implementos que los ayuden a dicho fin, como chaladoras, kit de herramientas para la poda, calaminas para módulos de secado, mallas para bandeja y carpas solares, con facilidades de pago.
“De toda la cadena del café, el más importante es el productor, es a él al que se le tiene que apoyar no solo en la fertilización del café sino haciendo que se sienta motivado y reconocido”, afirma. Para lograr ello, es necesario que el caficultor esté involucrado en el resto del proceso, que sepa de qué trata la cata o el tueste, y hacer que acceda a préstamos que pueda asumir y no a círculos de endeudamiento de los que después no puede salir”, sostiene Rony, convencido de que la joven empresa que dirige logrará sus objetivos. Como con el café, todo es cuestión de tiempo y aprendizaje.
DATO CAFETERO
LimCof Perú
Dirección: Av Pakamuros 2370, Jaén.
Teléfono: 997616186
